martes, 8 de septiembre de 2015

Respuesta a Dear Fat People



Soy gorda.

No es secreto para nadie que tengo sobrepeso y que lo he tenido desde que era niña. No voy a decir que es una enfermedad o condición. Es el resultado de las malas decisiones que he tomado en cuanto a mi alimentación desde pequeña. ¿OK? soy gorda.

Como representante de la comunidad obesa puedo decir con conocimiento de causa que no hay nada más falso que el mito del gordo feliz. No existe gordo que se vea al espejo y esté satisfecho con lo que ve. Ninguna persona con sobrepeso va por la vida pensando “¡Bien, ya llegué a los 100 kg, otros cinco más y voy a estar poca madre!”. Es simple: no hay gordo que no quisiera ser delgado.

Sin embargo es posible vivir con sobrepeso y tener autoestima. ¡Lo sé! ¡El shock!

Cierto, es INCREÍBLEMENTE difícil porque la sociedad tiene una gordofobia muy cabrona (sí, por muy estúpido que suene el término).  Ignoremos los MUY REALES problemas de salud que conlleva ser gordo por un minuto. El mundo dice una y otra vez que si tienes kilos extra eres un ciudadano de segunda categoría al que se le debe tener asco.

¿A qué viene esto?  Hace unos días una comediantucha de YouTube publicó un video haciendo comentarios hirientes contra las personas con sobrepeso e ¡internet perdió la cabeza!


Acusaciones de body shaming y bullying no se han hecho esperar, mientras otros defienden el derecho de esta señorita a la libre expresión.

Honestamente a mí, como ya establecimos una gordita, el video se me hace de lo más intrascendente. No porque crea que está bien lo que dijo, sino porque honestamente he escuchado cosas peores.

Toda mi vida he visto como personas que me tratan de una manera diferente porque soy obesa. Desde el tipo que dijo que necesitaba ir a terapia para poder apreciar mi “belleza” hasta los compañeros de trabajo que se muestran amables solo cuando empiezas a perder peso. La gente te trata diferente según tu volumen.

He presenciado la mirada de miedo de ciertos individuos cuando hablan conmigo temiendo que me puedan gustar (no corazón, no te voy a comer. Tendrías tanta suerte…) y cómo la gente cambia su trato para conmigo cuando me pongo la faja (todos los gordos tenemos una).

No, lo que Nicole Arbour puso en su video no me ofende. Sin embargo me preocupa. Yo llevo casi 30 años luchando para tener una buena imagen de mi misma y apenas (con muuucha dificultad) lo estoy logrando. Así que el video de esta vlogger no me afecta.

Pero pienso en la March de 13 años. En las niñas que como yo siempre han tenido una relación muy conflictiva con el espejo. En las que a diario luchan (contra la familia, los hombres, las compañeras, ellas mismas) para tener un mínimo de amor propio. Imagino a esas chicas viendo este video. Y entonces, con perdón de la expresión, sí me encabrono.

¿Cuántas niñas no verán este video y lo usarán para hacerse daño? ¿Para justificar el desorden alimenticio que empiezan a desarrollar? ¿Para darle validez a las estupideces que sus compañeras de escuela dicen?

Porque comentarios “bien intencionados” como el de esta señorita me mandaron a esconderme en el baño de la prepa con ataques de pánico cientos de veces. Arbour olvidó mencionar que hay diferentes tipos de cuerpos y que hay muchos gorditos (como su servidora) que están luchando por estar sanos y que es un camino que no toma 5 minutos.

¿De verdad, señorita Arbour, cree que nos gusta que nos tengan “asquito”? ¿Qué nos vean e inmediatamente asuman que somos flojos? ¿Que se rían de nosotros en cuanto tratamos de ir al gimnasio y hacer un cambio en nuestra vida? ¿Qué seamos invisibles? Porque esa es la verdadera tragedia de la obesidad: cuanto más grande eres, más invisible te vuelves.

Pierdes el derecho a ser feliz contigo mismo.

El body shaming, ya sea contra los flacos o panzones, puede ser letal. Nos obliga A TODOS a tratar de pertenecer a un ideal de belleza que es simplemente inalcanzable.

Lo que Arbour hizo no fue más que bullying, abuso que puede y ha resultado en jóvenes quitándose la vida. Si quería dar un buen mensaje (que creo que era el punto) el tono se le escapó de las manos impresionantemente. Se vale dar consejos, pero no como ella lo hizo.


Ridiculizar a las personas para que sean sanas ¡wow! Me imagino lo que esta chica tiene reservado para las alguien con un mal cardiaco…

Una comediante que simplifica hábitos, genética, PSICOLOGÍA, ejercicio y toda variable que produce sobrepeso por un chiste es una mala comediante. 

Este video ignora el hecho de que no todos somos gordos solo por comer de más y que si fuera tan fácil no ser obeso como ella se burla ¡TODOS NOS HUBIÉRAMOS DETENIDO HACE AÑOS

Burlarse del cuerpo de otro jamás será positivo ni le ayudará a estar sano. Solo destruye el espíritu de los más frágiles y deja secuelas que, créanme, duran para toda la vida.

Si un gordito me lee, solo quiero decirle que vale mucho y merece luchar por estar sano y que pueden ser disfrutados COMO SERES HUMANOS, con o sin kilos de más.